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Jan Steeman, la biografía capulla

Como ya expliqué en su día acerca de España y su guerra personal contra las lenguas extranjeras, me he tomado la libertad de traducir y resumir estos manuscritos.

Comenzó a escribir en su adolescencia, cuando su cara se convirtió en una explosión de granos. Semejantes bombas de pus le alejaron de las putillas en edad de festear que todo onanista adolescente busca y esa soledad le llevó a refugiarse en su interior. Por desgracia, y a pesar de la fama que las belgas tienen entre los franceses, el jovencito Steeman tuvo que acostumbrarse a los callos.

Tiempo después, y tras una carrera truncada en el mundo de los deportes, como por ejemplo el curling, badminton y waterpolo, éste último por robar balones del almacén y pegar toallazos en el culo en las duchas, comenzó a centrarse en su faceta de liante.

El robo de balones y el conocer a su primera novia (una hippie porrera de Lisboa), hizo que los pelos de la espalda se le erizaran del gusto. El bigote y los pelos sobaqueros de la novia, no tanto.

La muerte de su novia, atropellada por un tándem, fue el detonante para desarrollar su faceta de ladrón y capullo, llegando a ser bastante conocido por la policía belga.

Buscando bares que no cerraran llegó a la península ibérica y buscó trabajo de especulador, y mientras, por las noches busca tema en los pubs y discotecas, y cuando tenía acceso a las casas ajenas, acababa robando electrodomésticos, revendiéndolos en su tiempo libre por Ebay u otros medios.

Poco a poco, esto fue a más y la cosa se desató, sembrando el terror en el mundo universitario. La voz fue corriendo y llegó a ser el protagonista de historias que se contaban en las noches de luna llena y viento de levante, como el “belga de la curva”, “el belga del lago Ness” o lo de decir “Jan Steeman” 3 veces delante del espejo.

La cosa iba viento en popa, y las denuncias se iban acumulando. Los siguientes capítulos son confusos, pero parece que actualmente se aloja en un hotel de Barcelona o volvió a su ciudad natal, Hasselt. Al menos barajaba estas dos opciones, pero no te confíes, es tan capullo, que puede haberlo hecho para despistar.

Hasta aquí puedo leer. Poco a poco iré resumiendo y contrastando la información que tengo en mi mano acerca del pieza este, así como detallando los puntos más oscuros de su biografía.

- El belga capullo

- Jan Steeman, la biografía capulla

- La biografía capulla 2. Aún más capulla

Etiquetas: curiosidades, gilipollas

Perpetrado por Palmz @ 2:35 p. m. 3 eructos